Amigos de la Tierra La Rioja reclama al Gobierno de La Rioja y a la Confederación Hidrográfica del Ebro que obliguen a adoptar medidas a Riograsa para evitar nuevos vertidos al Najerilla
De acuerdo con un informe enviado desde el Gobierno de La Rioja, a petición nuestra, la empresa Riograsa ha realizado vertidos de grasas al Najerilla los pasados 10 y 16 de enero del presente año.
Además se volvieron a producir los pasados, 9, 24 y 25 de mayo nuevamente vertidos. Estos vertidos realizados desde un barranco llegaron al Najerilla.
En la primera ocasión se informa en este documento lo siguiente “De acuerdo con la información aportada por el titular de la empresa, este manifiesta que el vertido de grasa se produjo mientras se efectuaban operaciones de llenado de producto final y que, para evitar en el futuro los posibles fallos de los sistemas de seguridad de llenado de los depósitos puedan provocar derrames de grasa, ha procedido a instalar dos medidas de seguridad físicas adicionales, consistentes en la recogida de grasa mediante sobradero y la instalación de cubeto de contención alrededor de los depósitos”.
Evidentemente las medidas planteadas por la propiedad de Riograsa o no se adoptaron o fueron insuficientes, por lo cual nuevamente en el mes de mayo se produjeron nuevos vertidos.
Asimismo en el informe que nos ha enviado Medio Ambiente se indica que los vertidos tenían altísimos valores de Demanda Química de Oxigeno y Demanda Biológica de Oxigeno, así como un gran contenido de aceites, grasas y sólidos en suspensión. Todo esto al final tuvo que ser depurado por propio río, en detrimento de los seres vivos que tiene el río.
Debemos tener en cuenta que en la zona existen especies en peligro de extinción como el visón europeo (Mustela lutreola), y hechos como los descritos poco ayudan a recuperar esta especie. Por lo tanto, Amigos de la Tierra La Rioja independientemente de las sanciones que procedan, reclama al Gobierno de La Rioja y a la Confederación Hidrográfica del Ebro que insten a Riograsa a adoptar medidas para que no se vuelvan a producir los vertidos.