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Amigos de la Tierra considera inadmisible la forma en que la Confederación Hidrográfica del Ebro permite realizar ciertas talas de chopos en la ribera del Ebro. En este caso concreto, en un tramo de ribera del Ebro en Cenicero.

Al margen del hecho de que existan superficies de producción de chopo en la ribera del Ebro, estas no deberían en ningún caso llegar hasta la misma orilla, y habría que asegurar una superficie mínima de vegetación natural de ribera.

Cuando se talan los chopos de la línea más cercana al cauce, la orilla queda totalmente desprovista de cubierta vegetal, con dos implicaciones muy claras:

Primero, que la zona pertenece por completo al área de distribución del amenazado visón europeo (Mustela lutreola), especie a cuya conservación se destinan grandísimas cantidades de dinero público. Los escasos sotos de ribera cercanos pertenecen a la zona protegida Red Natura 2000 en La Rioja (Sotos y riberas del Ebro). La principal causa de desaparición de este animal es la destrucción de las riberas, por lo que la manera en que se realizan estas talas supone un impacto directo y muy grave, al dejar la orilla desprovista de vegetación. Los ríos actúan como corredores ecológicos mediante los cuales se conectan poblaciones animales entre zonas alejadas. Pero para ello es fundamental la cobertura vegetal.

Y segundo, que es por todos sabido el papel estabilizador que cumplen los árboles, con sus raíces, en las orillas de los cauces. Son ellos los que sujetan los márgenes y los que protegen la ribera en episodios de crecidas. En la actualidad, teniendo en cuenta el panorama climático y las políticas ambientales que persiguen la adaptación a estos fenómenos naturales extremos, resulta inadmisible deforestar así las orillas de un río.

Por todo ello, RECLAMAMOS que de forma INMEDIATA se regenere la primera línea del río con vegetación de ribera para que cumpla todo expuesto anteriormente.
Y que se reflexione acerca de la actual política para, al menos, para impedir que estas talas incluyan los árboles más cercanos al río, aunque se trate de chopos.

En Logroño, 14 de mayo de 2021

Recientemente nos llegó la noticia del futuro centro de cría de visón europeo (Mustela lutreola), cuya construcción se llevará a cabo en la finca riojana de Ribavellosa, en el término municipal de Almarza de Cameros, y que pertenece al Organismo Autónomo de Parques Nacionales.

Noticia:

https://www.rioja2.com/n-150713-2-ribavellosa-acogera-un-centro-de-cria-del-vison-europeo/

El visón europeo es un pequeño mustélido semiacuático que se encuentra en grave peligro de extinción a escala mundial, y cuenta en La Rioja con una de sus últimas poblaciones. Esta especie prefiere los tramos medios y bajos de los ríos, con abundancia de cobertura vegetal.

Dicho proyecto persigue el objetivo de criar visones, con el fin de reforzar sus poblaciones salvajes mediante la suelta de ejemplares previamente aclimatados al medio.

Desde Amigos de la Tierra La Rioja consideramos que se trata de una muy buena iniciativa, y una medida necesaria para alejar a esta especie de la completa desaparición.

No obstante, creemos que es importante recordar que no solo con la cría en cautividad se podrá conseguir la conservación de esta especie. El visón europeo tiene dos grandes problemas: el deplorable estado de las riberas ibéricas y la presencia de un competidor foráneo, el visón americano (Neovison vison), más grande y agresivo que el autóctono. Es por ello que resulta indispensable cambiar radicalmente el modelo de gestión actual de las riberas, tanto en La Rioja como en el resto de España. Ya hay actuaciones que persiguen renaturalizar algunos tramos fluviales, pero son insuficientes, ya que también se siguen realizando en muchos tramos actuaciones anticuadas y muy impactantes sobre el medio natural, como encauzamientos, embalses y muchos vertidos. Este último problema, el de la contaminación de las aguas, está muy lejos de solucionarse, ya que casi semanalmente, desde esta asociación, seguimos denunciando vertidos ilegales en los ríos riojanos, ante la impasibilidad de la Administración e incluso de la CHE (Confederación Hidrográfica del Ebro).

El visón europeo no podrá recuperarse si tan solo centramos los esfuerzos en criarlos en centros como el que se proyecta, sino que debe ser una herramienta que trabaje conjuntamente con otras actuaciones tanto o más necesarias, como la verdadera renaturalización de nuestros ríos, con la recuperación del espacio fluvial, el cese de las obras duras como escolleras y encauzamientos y la finalización de los vertidos a las aguas.

Fotografía de David Fernández Altuzarra. Visón europeo en cautividad en el Zoo de Madrid

Fotografía de David Fernández Altuzarra.   Visón europeo en cautividad en el Zoo de  Madrid

Lugar donde se proyecta el centro de recuperación:

El río Iregua sufre esta semana un nuevo ataque en su ya degradado tramo bajo, el que corresponde al Parque del Iregua, en el término municipal de Logroño.

Las máquinas han vuelto a entrar en el cauce, una vez más, para modificar su trazado. En esta ocasión ha sido bajo el puente de Avenida Zaragoza, cerca del barrio de Varea.

Es cierto que el río estaba erosionando la escollera de la orilla derecha en ese punto y que podría existir el riesgo de que en el futuro se viera comprometida la estabilidad de la escollera. En ese aspecto la actuación puede ser comprensible.

Pero es cierto también, que justo en ese punto se había creado una poza muy favorable para la fauna del río y para su funcionamiento general como ecosistema. En el lugar hay presencia comprobada de especies tan emblemáticas como la nutria (Lutra lutra) y el castor europeo (Castor fiber), que además se encuentran protegidos por ley. Incluso es posible que en la zona haya visón europeo (Mustela lutreola), gravemente amenazado a nivel mundial. Este tramo del Iregua se encuentra enormemente degradado a raíz de las obras que supusieron la creación del Parque del Iregua, en las que se destruyó por completo el ecosistema de ribera y el río quedó como un simple canal de agua.

Además, las obras se han llevado a cabo sin salir a exposición pública, por ser consideradas “de emergencia”, y durante el período de reproducción de la trucha común (Salmo trutta), que realiza la famosa freza en estas fechas. Teniendo en cuenta que en ese pozo había presencia de grandes ejemplares, es probable que las obras hayan destruido varias puestas. En estas fechas también se reproducen otras especies citadas como el visón y el castor, y actuaciones como esta interfieren directamente ya que suponen un gran estrés para los animales.

Otro aspecto que queremos destacar es que el hecho de que el río erosione en esa zona ha sido facilitado por el empeño de situar ahí un tramo del sendero que recorre todo el parque. Era una zona que, al quedar bajo el puente y cerca de una carretera, no dejaba prácticamente espacio de orilla, y sin embargo se construyó el sendero igualmente, en lugar de desviarlo por otro lugar. Para crear ese sendero se empleó la típica escollera, en lugar de optar por métodos más naturales e integrados, como diversas técnicas de bioingeniería basadas en la utilización de plantas como agentes estabilizadores de orillas.

Por todo ello, consideramos que, aunque la actuación fuera verdaderamente necesaria para afianzar el puente, se debería haber llevado a cabo en otra época del año, y en cualquier caso se debería compensar con una actuación en algún punto cercano para mejorar la calidad del ecosistema de este tramo. Por ejemplo, se podría crear otra poza cerca o realizar una reforestación con especies autóctonas para incrementar el espacio que la vegetación de ribera ocupa en el tramo, que actualmente es ridículo.

De poco sirve pretender aspirar a títulos como “Ciudad Verde”, al mismo tiempo que se destruyen los pocos ecosistemas naturales que nos quedan en la ciudad de Logroño. Este tramo presenta gran potencial para ser restaurado, sin que ello fuera en detrimento de su uso público, pero el ayuntamiento nunca ha mostrado interés en ello.

A continuación, se muestran fotografías de la actuación.