En los Presupuestos Generales del Estado se contempla una inversión de 500.000 euros, supuestamente para el proyecto de desdoblamiento de la N232 desde el límite con Navarra hasta Calahorra. Al mismo, tiempo se acerca el fin del peaje de la AP 68, que será el 10 de noviembre de 2026.
Siempre que se habla de obras públicas para La Rioja se ven como positivas para nuestra Comunidad Autónoma. Sin embargo, el presente desdoblamiento de la N 232, cuando está tan próximo el fin del peaje de la AP 68, suena absurdo y a disparate. Podemos llegar a finales de 2026 y tener dos autovías para el mismo tráfico que en la actualidad. No es algo viable ambientalmente ni económicamente.
Esta nueva autovía discurrirá por suelos de una altísima productividad agrícola, pero también por algunos espacios naturales muy escasos en el valle riojano. No nos podemos permitir perder más suelo, cuando ya existe una autopista que será gratuita en unos pocos años. A esto podemos sumar el nuevo trazado ferroviario que en algunos lugares no se realizará sobre el trazado actual.
Nuestra región se merece inversiones para muchas cuestiones, pero para realizar infraestructuras que ya existen no.
Pedimos racionalidad a los partidos políticos para que no se lleve a cabo este disparate, que afectará a nuestra economía, medio natural y sociedad.
En Logroño, 13 de octubre de 2022