Hemos podido comprobar “in situ” como se han talado un tramo de ribera de elevado valor ambiental en pleno cauce del Yalde, por tanto, en dominio público hidráulico, es decir, terreno de todos. Este atentado ambiental sobre nuestro depauperado patrimonio ambiental, en primer lugar, requiere una denuncia ambiental, que como ciudadanos responsables hemos cursado por cauce administrativo a las dos administraciones implicadas, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y al Gobierno de La Rioja; en segundo lugar, requiere de una difusión pública para escarnio de los responsables y ejecutores de semejante; en tercer lugar, una depuración de responsabilidades, y en cuarto lugar, una inmediata restauración ambiental y compensación para restituir en la medida de lo posible lo irreversiblemente dañado.

Vemos habitualmente en los medios de comunicación como representantes del Gobierno de La Rioja y de la CHE realizan “postureo” ambiental y lavado verde “greenwashing” defendiendo las bondades del proyecto “Ebro Resilence” en localidades de la Rioja Baja, proyecto que no cuestionamos, pero que en el fondo y las formas persigue revertir el sistemático robo del dominio público hidráulico cometido durante décadas con la ignominia y quiescencia de las administraciones a costa de todos los ciudadanos y para beneficio de actividades privadas como la agricultura, la ganadería y la explotación forestal intensiva de chopos exóticos;. Sin embargo, podemos comprobar en el terreno como el ecosistema ripario de un afluente del río Najerilla sufre una agresión tan desmedida como la tala de arbolado con una estructura y madurez envidiable, de enorme singularidad ambiental, a la vista de todos, y que abarca unos 100 metros de tala antes y después de la carretera LR 321. A ojos de cualquiera, resulta una incoherencia y una irresponsabilidad perseguir loables objetivos de restauración ambiental del río Ebro en la Rioja Baja a través del proyecto “Ebro Resilence”, pero no sostener prácticas análogas de protección ambiental en los afluentes del Ebro, como el Yalde, o en el propio Ebro en la Rioja Alta. Por todo ello, y finalmente, demandamos públicamente a la CHE y al Gobierno de la Rioja un proyecto integral de recuperación de las riberas y del DPH del río Yalde, que es algo completamente ineludible


amigos
Solicitamos la demolición de la presente presa por los anteriores impactos que está ocasionando. Finalmente, la Confederación Hidrográfica del Ebro ha decidido extinguir este aprovechamiento y requerir a la empresa propietaria a que demuela este obstáculo en el río Brieva.
Ese proyecto fue remitido el pasado 22 de septiembre del año 2021 por la CHE al Servicio de Conservación de la Naturaleza y Planificación de la Dirección General de Biodiversidad del Gobierno de la Rioja para conocer la evaluación de las repercusiones ambientales. Para sorpresa de cualquier persona sensible en materia ambiental y conocedora del deplorable estado de conservación de nuestros ríos, el órgano ambiental competente regional se despachó favorablemente, con un informe de apenas 4 folios, a todas las actuaciones propuestas de la CHE, señalando escasas limitaciones físicas y temporales a las obras por la presencia de apenas dos especies protegidas (visón europeo y desmán ibérico), y afirmando, sin demostrar ni hacer una evaluación competente, que no se iban a producir afecciones significativas sobre hábitats y taxones de interés comunitario y que todas las actuaciones resultaban compatibles con los objetivos de conservación establecidos en los Planes de gestión y ordenación de los recursos naturales de espacios de la Red Natura 2000. 
En 2019 estaba previsto llevar a cabo un nuevo estudio sobre la situación de esta especie en La Rioja, ya que el último se llevó a cabo en 2011. En dicho trabajo las conclusiones a grandes rasgos fueron:
En los últimos años hemos tenido la sensación de que los “sustos” en forma de crecida de caudal cada vez han sido más frecuentes y cabría preguntarse ¿Qué posibilidad hay de que barrios pegados a la ribera (Como es el caso de El Campillo) se inunden en una avenida del Río?
El pasado agosto denunciamos ante el Seprona y a la Confederación Hidrográfica del Ebro el vertido de aguas residuales desde el polideportivo de usos múltiples de Nájera al río Najerilla. Este vertido se está realizando sin ningún tipo de depuración previa y corresponde al casco antiguo de esta localidad.
Los espacios esteparios de Cofín, junto con la yasa del mismo nombre y el Área Natural Singular del “Carrizal de Cofín” albergan una gran cantidad de especies de fauna, tanto esteparia como acuática ligada a los encharcamientos naturales producidos en los saladares de la zona o en los carrizales, potenciadas con la construcción de la laguna artificial.

Dado que las administraciones públicas implicadas conocen perfectamente esta situación, sobre todo el Ayuntamiento de Huércanos que ha hecho una completa dejación de funciones con este espacio natural, hemos decidido poner en conocimiento estos hechos ante la Fiscalía. La situación de esta pequeña laguna nos parece completamente intolerable.


