En las últimas décadas, las poblaciones de golondrinas, aviones y vencejos han experimentado un claro declive.

Estos días de la primavera tardía, vemos el cielo de nuestros pueblos y ciudades plagado de aves chillonas que vuelan a toda velocidad por encima de nuestras cabezas, sobre todo durante los atardeceres. Son las aves insectívoras más abundantes en núcleos urbanos por goleada, denominadas los tres mosquiteros de nuestras ciudades. Estas tres especies son el vencejo, el avión común y la golondrina. Y, ¿por qué estamos hablando de ellas ahora? Bueno, resulta que estas aves son especies migradoras, pasan el otoño y el invierno en África y vienen a Europa en primavera para reproducirse y criar. Es por lo que ahora, esta época del año, es un momento crucial para perpetuar su descendencia.

Su llegada, lógicamente, coincide con calor y, consecuentemente, con la explosión demográfica de ciertas especies de insectos molestos para la población como moscas y mosquitos, y es que estos grupos pueden llegar a constituir hasta un 70% de su dieta. Esto demuestra que son aves eficientes en controlar las poblaciones de estos insectos y, además, son indicador de buena calidad ecológica de nuestras ciudades.

A pesar de los beneficios que nos proporcionan estas aves, no siempre se favorece su presencia. Las golondrinas y los aviones comunes hacen sus nidos de barro y agua en cornisas y salientes de los edificios lo que provoca, a veces la acumulación de heces y suciedad en balcones, repisas… etc. Debido a esto, la eliminación y destrucción de nidos que constituye una amenaza para la conservación de estas dos especies. SE TRATA DE UNA PRÁCTICA PROHIBIDA Y PUEDE SUPONER LA IMPOSICIÓN DE MULTAS O INCLUSO LLEGAR A CONSTITUIR UN DELITO CONTRA LA FAUNA. Los vencejos, en cambio, usan cavidades de edificios antiguos para colocar ahí sus nidos y, cada vez, estos huecos son más escasos debido a derribos de edificios antiguos y por nuevas técnicas de edificación que no dan lugar a la aparición de espacios para nidificación. Otra amenaza importante en los últimos años, es el aumento de las temperaturas durante la época de cría que produce altas mortalidades de crías por el calor y la falta de agua. Luego encontramos diferentes causas como la disminución de alimento por uso de plaguicidas o por atropellos, colisiones contra cristales…etc.

En las últimas décadas, las poblaciones de estas especies han experimentado un claro declive por lo que se han catalogado como especies vulnerables en el Libro Rojo de las Aves de España 2021 y se han incluido en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial.

Desde Amigos de la Tierra La Rioja, queremos divulgar sobre la importancia de estas especies en ecosistemas urbanos y los beneficios que nos proveen. Por todo esto, hemos lanzado una campaña en la que queremos informar a la ciudadanía de su importancia y piensen dos veces a la hora de decidir eliminar y destruir sus nidos. ¡Recuerda, estos tres mosquiteros son nuestros aliados!

En Logroño, 18 de junio de 2023

Reclamamos al nuevo ejecutivo regional que cumpla estrictamente con la legislación vigente sobre los agroecosistemas del valle del Ebro y que impulse políticas activas para la recuperación y restauración de especies y espacios ligados a dichos entornos ambientales.

Amigos de la Tierra La Rioja celebra el Día Mundial del Medio Ambiente este lunes 5 de junio de 2023, una fecha anual propuesta por la ONU en 1977 para sensibilizar a la población mundial en relación con cuestiones ambientales, como elemento de atención y de acción política acerca de preservación de nuestro patrimonio natural, sin el cual, no habrá viabilidad a largo plazo de la especie humana entendida en los términos actuales.

Imagen 1. Pradera espontánea entre cultivos.

Para conmemorar este día, nuestra asociación quiere reclamar la necesidad de conservar los depauperados ecosistemas del Valle del Ebro, una zona sometida a la explotación intensiva de sus recursos naturales desde hace milenios, pero que últimamente está sufriendo una transformación más que significativa debido a los cambios en el modelo agroganadero. Es en esta zona de nuestra región donde menos hábitats naturales encontramos y los pocos que quedan están cada vez más severamente degradados y fragmentados. Entre las causas de esta situación encontramos la intensificación de las prácticas agroganaderas, incompatibles con la conservación de suelos y de las comunidades biológicas. También, la zona del Valle es el área más poblada de la comunidad, donde se encuentran los grandes núcleos de población humanos, las zonas industriales, y todas las infraestructuras viarias asociadas (cada vez más crecientes y que amenazan sinérgicamente la conectividad ambiental en nuestra región) Todo esto unido, con el cambio climático global, que ha provocado que los pocos retazos naturales de esta zona se encuentren cada vez en una situación más vulnerable.

Los escasos hábitats y ecosistemas naturalizados que encontramos aún en el valle del Ebro son zonas esteparias, matorral bajo mediterráneo, coscojares, algunos bosques de ribera y encinares, todos ellos amenazados por escasa madurez estructural e intensos usos humanos (incluida la caza). Además, encontramos ecosistemas poco usuales como complejos lagunares, hábitats gipsófilos y salinos. También queremos destacar los agroecosistemas creados por el hombre, pero que mantienen elementos naturales siempre y cuando respeten los bordes de caminos, lindes o dehesas que favorecen en cierto grado a la biodiversidad. Por otro lado, estas formaciones vegetales conforman un refugio para muchas especies animales, las cuales se encuentran amenazadas debido a la desaparición de estos hábitats. Es sobradamente reconocido en todos los estamentos sociales (incluidos gestores, científicos, y público, en general) el declive de todas las especies y comunidades en el Valle, tal es el caso de las aves esteparias como el sisón o varios grupos de insectos, como los polinizadores, importantísimos para la viabilidad de ciertos cultivos en el tiempo (p.ej., frutales).                                                            Imagen 1. Matorral bajo mediterráneo.

Por todo esto, en el Día Mundial del Medio Ambiente y pasada una semana de las elecciones autonómicas, reclamamos al nuevo ejecutivo regional que tenga en cuenta el marco regional, nacional e internacional que protege a estos ecosistemas e impulse políticas activas para el desarrollo de una agricultura compatible con la biodiversidad a través de fondos de la PAC que no sean perversos para la conservación de espacios y especies. Para el resto de la población, pretendemos que se tome conciencia de la importancia de estos retazos de paraje natural que aún nos quedan en nuestra comunidad y que sobrevive entre una maraña de lugares sumamente humanizados.

Imagen 3. Laguna endorreica entre campos de cultivo.

Amigos de la Tierra La Rioja ha presentado alegaciones a un proyecto realizado por la Sección de Caza y Pesca de la Consejería de Sostenibilidad Transición Ecológica presentado en la Confederación Hidrográfica del Ebro, que plantea la demolición de dos azudes de gran altura, lo cual es loable, aunque llegue tarde, pero a su vez plantea la construcción de cuatro nuevos diques, de menor tamaño, en el tramo del río Najerilla en Villavelayo.

Desde Amigos de la Tierra valoramos positivamente las acciones propuestas en un informe gubernamental que abogan por la demolición de dos azudes de gran altura en ese tramo del Najerilla, permitiendo a la fauna acuática remontar el curso aguas arriba y mejorar la conectividad del propio río. Ello está en consonancia con las directrices y recomendaciones de la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos 2022-2030, así como con las exigencias europeas y nacionales (Directiva Marco del Agua, etc.).

Pero lo que no se entendible es que el Gobierno de la Rioja haya tardado tanto tiempo en percatarse de que esas infraestructuras son perniciosas para la dinámica fluvial, y sobre todo, que esa demolición de dos azudes, vaya acompañada de la construcción de cuatro nuevos diques, aunque sean de pequeñas dimensiones, porque así no se consigue más que perpetuar la artificialización del río.

Si la restauración de ese tramo del río llega tarde, no parece razonable ni compatible que eso se pretenda conseguir con más cemento y hormigón. La diversificación del hábitat fluvial y la minimización de la erosión y riesgos de avenidas, no se produce con más cemento y hormigón, sino favoreciendo la heterogeneidad natural intrínseca del río, devolviendolos a sus características naturales, restaurando los bosques de ribera y dotando de espacio físico al río, además de impedir la realización de actividades humanas en el dominio público hidráulico. Creemos que, si el objetivo principal de esos diques es el de proteger orillas y márgenes de la erosión, se pueden tomar otras medidas alternativas y eficaces como la construcción de muros Krainer así como por apostar por técnicas de bioingeniería. Tampoco tiene sentido seguir alterando hábitats críticos de especies amenazadas, declaradas en peligro de extinción recientemente por el propio Gobierno de la Rioja, como el desmán ibérico (Galemys pyrenaicus).

Por todo ello, pedimos la retirada del proyecto en los términos en los que está contemplado.

 

En Logroño, 15 de abril de 2023

 

Amigos de La Tierra La Rioja

La Consejería solicita la demolición de dos azudes para favorecer la
conectividad de la trucha.

Amigos de la Tierra La Rioja ha sido informado de un proyecto a cargo de la Consejería de
Transición Ecológica con permiso de la Confederación Hidrográfica del Ebro para la
demolición de dos azudes de gran altura y la construcción de cuatro nuevos diques de
menor tamaño en el tramo del río Canales en el término municipal de Canales de la Sierra.
El objetivo principal de estas demoliciones es favorecer y mejorar la conectividad de la
trucha permitiendo a los animales migrar a lo largo del río, evitando el confinamiento de las
poblaciones piscícolas. Por otro lado, la construcción de cuatro nuevos diques serviría para
evitar el cambio brusco de caudales y condiciones del río, la erosión de determinadas orillas
y el colapso de algún margen que pueda afectar a terrenos colindantes.
A priori, estas acciones de demolición de azudes de gran altura nos parecen que tendrán un
impacto muy positivo en ese tramo del Najerilla, permitiendo a peces y otros tipos de fauna
acuática remontar el curso aguas arriba y mejorar la conectividad del propio río. Según la
Consejería, la construcción de cuatro nuevos diques de pequeñas dimensiones se usarían
para diversificar el hábitat fluvial ya que el escalonamiento del perfil del río produciría el
estancamiento del agua por encima del dique, formando una pequeña poza. Sin embargo,
desde nuestra asociación creemos que esta segunda medida no es la más adecuada, ya
que siguen siendo elementos no naturales en el río y que, a pesar de su pequeña altura,
puedan ocasionar problemas de dispersión a otras especies de fauna diferentes a las
truchas como algunos ciprínidos de interés comunitario. También queremos tener presente
al desmán ibérico, especie declarada en la comunidad como “Vulnerable” y de interés
comunitario según la Directiva Hábitats, y cómo estos diques le pueden afectar, sobre todo
al hábitat que este animal usa.

Para finalizar, queremos apoyar la iniciativa de la Consejería de demoler esto dos azudes
de gran altura, pero criticamos la decisión de construir nuevos azudes más bajos. Creemos
que, si el objetivo principal de estas construcciones es proteger orillas y márgenes de la
erosión, se pueden tomar otras medidas como la construcción de muros Krainer y apostar
por técnicas de bioingeniería.

Amigos de la Tierra La Rioja reclama una política de recuperación ambiental de nuestros ríos.

En los últimos años hemos estado viendo que las zonas ribereñas en tramos urbanos se están convirtiendo en una oportunidad socio-ambiental para el ocio y disfrute, sobre todo si esas ciudades carecen de suficientes zonas verdes. Muchos de estos espacios se encuentran encajonados en una matriz de asfalto y hormigón propia de las ciudades y sus zonas agroindustriales.

Con estos antecedentes y una ineficiente e insostenible artificialización de los ríos, además de ilegal en un contexto europeo, son muchas las ciudades que han iniciado una reversión de esta situación, recuperando y renaturalizando los ríos en sus tramos urbanos, devolviéndoles su funcionalidad ecológica. Tales actuaciones transforman sitios degradados y artificializados en lugares naturales, que pueden proporcionar espacios de ocio lo más sostenibles posibles para la ciudadanía, mejorando el funcionamiento de los núcleos urbanos, su ambiente, y en la salud colectiva. Estas iniciativas de restauración ambiental están llamando la atención de autoridades públicas (locales, regionales e hidrográficas), quienes ven, además, una oportunidad económica que permita construir un futuro ambientalmente más sostenible. Dichas acciones se enmarcan en el “Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia” del Gobierno de España. Son numerosas las localidades de La Rioja las que están apostando por estos modelos, incluso grandes capitales como Madrid.

Sorprendentemente, en el tramo urbano del Cidacos en Autol, nos encontramos con un modelo de acción completamente opuesto: obras en el cauce  que son tremendamente agresivas con la dinámica fluvial, y la fauna y flora que aún albergan. Estas obras, posiblemente disfrazadas como actuaciones de mejora urbana, van en la dirección contraria de lo anteriormente señalado, y están en clara oposición con lo que cabría esperar en responsables públicos que se precien por proporcionar un entorno saludable y ambientalmente más respetuoso a sus habitantes.

El río Cidacos ya está profundamente deteriorado en gran parte de su cauce debido a un caudal insuficiente y un exceso de riegos agrícolas. Es competencia de las autoridades locales que se evite este deterioro y se cometan más agresiones en su entorno. Desde Amigos de la Tierra La Rioja pedimos que las administraciones implicadas en la gestión del Cidacos diseñen un plan de recuperación ecológica para todo el río, incluidos sus tramos urbanos, como el de Autol.

 

Exigimos la paralización de actuaciones

Con la tragedia que estamos viviendo por los devastadores incendios en los montes de España, nos preguntamos si no tendríamos que proteger más nuestros bosques, que tantos beneficios nos reportan.

En los hayedos de La Rioja Baja se vienen observando aprovechamientos forestales que no se ajustan a la explotación forestal sostenible que debería imperar en unos delicados bosques que están al borde de su área de distribución y que hay que cuidar con especial esmero.

En la Sierra de la Hez, Ocón, y en el hayedo de Santiago, Zarzosa, se han talado alrededor de 800 hayas de hayas maduras, de gran tamaño, así como árboles muertos, bifurcados, inclinados…árboles “feos”. Los árboles maduros son grandes contenedores de CO2 y por su envergadura y son los que mejor resistirían una feroz sequía como la que ya estamos atisbando. Los muertos, así como los que no tienen a una forma regular, son los que más biodiversidad generan ya que son el hogar y alimento de muchas especies, pájaros, insectos, etc.…

Produce una tremenda desolación, además, comprobar que, en el hayedo de la Hez, se ha impulsado por la CAR la apertura de una nueva pista forestal de más de dos kilómetros para simplificar el transporte de los árboles abatidos. Además de que esta pista no era necesaria, las dimensiones son exageradas, llegando a los 13 metros de anchura en algún punto (aproximadamente la misma que la calle República) sin que se hayan realizado, drenajes o ripiados, medidas para contener la futura erosión en el terreno causada por semejante actuación.

Fíjense que en esta foto hay una persona y la escala del desaguisado.

 

En el hayedo de Monte Real, Zarzosa, se va a talar con los mismos criterios que los anteriores.

Tanto el hayedo de Santiago como el de Monte Real pertenecen a la Red Natura 2000. Esto significa que están protegidos y que, si bien, está permitida la tala ésta debe hacerse conforme a unos Planes de Gestión, así como al Manual de Buenas Prácticas en Gestión Forestal Sostenible del Gobierno de La Rioja.

A la vista de las actuaciones llevadas a cabo dudamos que se estén respetando estas herramientas para la protección de nuestros bosques y pensamos que la Administración Autonómica ha priorizado el rendimiento económico frente al criterio medioambiental de estos hayedos supervivientes en estas latitudes.

Exigimos que se paralice la actuación en el hayedo de Monte Real y se revise los criterios de tala respetando, en todo caso, el Manual de Buenas Prácticas en Gestión Forestal Sostenible del Gobierno de La Rioja. Así mismo, requerimos que se restituya la pista abierta a su situación anterior o, en su caso, a lo determinado en el pliego de condiciones.

En Logroño, 3 de julio de 2022

A principios de 2021 desde ambas asociaciones transmitimos en el procedimiento legal sobre esta central a la Confederación Hidrográfica del Ebro lo siguiente:

  • Que la presa de “La Retorna”, con sus 14 metros de altura, se encuentra en una zona comprendida dentro de la Red Natura 2000, en concreto en el espacio “ES0000067 Sierras de la Demanda, Urbión, Cebollera y Cameros”.
  • Que la presente central hidroeléctrica está afectando a especies como el desmán ibérico (Galemys pyrenaicus) así como al cangrejo de río (Austropotamobius pallipes) ambas especies en peligro de extinción en La Rioja.

Solicitamos la demolición de la presente presa por los anteriores impactos que está ocasionando. Finalmente, la Confederación Hidrográfica del Ebro ha decidido extinguir este aprovechamiento y requerir a la empresa propietaria a que demuela este obstáculo en el río Brieva.

Desde Amigos de la Tierra La Rioja junto AEMS-Ríos con Vida pedimos que esta demolición se realice inmediatamente y que no se demore en el tiempo, como con la piscifactoría de Torrecilla en Cameros.

La demolición de esta central sería un importante paso adelante en la conservación de nuestros ecosistemas de ribera, que esperamos que se haga realidad lo antes posible.

 

En Logroño, 22 de junio de 2022

En La Rioja no estamos para celebraciones en materia de biodiversidad. Recientemente nos hemos enterado en el Consejo Asesor de Medio Ambiente sobre la extinción del sisón común (Tetrax tetrax) mientras que las restantes aves esteparias se encuentran en una situación sumamente delicada. El principal motivo podemos encontrarlo en la grave alteración que está sufriendo su hábitat, sin que la administración competente haga nada, salvo certificar su extinción.

Otro tanto sucede con el Águila perdicera (Aquila fasciata) reducida a tres escasas parejas, con graves alteraciones de su hábitat unas veces con instalaciones eólicas o solares, estas últimas próximamente se construirán, transformaciones en regadío… También tenemos que sumar el desinterés del Gobierno Regional por sumarse a proyectos LIFE sobre Águila perdicera. Dirán que otras autonomías no los llaman, pero eso solo se puede deber a su escaso interés.

Del visón europeo (Mustela lutreola) poco se dice. Ya no son los tiempos de “Musqui” donde el Gobierno de La Rioja sacaba pecho de tener una de las poblaciones más importantes de Europa. Problemas no le faltan al visón europeo la presencia del visón americano, riberas reducidas a su mínima expresión en diversos ríos….

Con la náyade auriculada (Margaritifera auriculada) resulta que el MITECO firmó un acuerdo con Navarra y Aragón mientras La Rioja no participa cuando se trata de una especie en peligro de extinción. El Gobierno de La Rioja buscará excusas para darnos, pero lo cierto es que o no tienen ganas de trabajar con esta especie o no cuentan con personal, siendo esto último muy fácilmente solucionable.

Podemos continuar con más especies (Cangrejo autóctono, Perdiz pardilla…), en muchos casos la delicada situación en que se encuentran esta motivada por la desaparición de su hábitat, siendo las restantes causas menores.

Amigos de la Tierra La Rioja NO VA A CELEBRAR EL DÍA MUNDIAL DE LA BIODIVERSIDAD porque creemos que no se puede celebrar. Instamos al Gobierno Autonómico que empiece a trabajar porque ya queda poco tiempo para revertir toda esta situación

En Logroño, 20 de mayo de 2022

La CHE quiere despilfarrar 657.616 € de dinero público en intervenciones que degradan la calidad ambiental de hábitats y especies protegidas de riberas de la cuenca del Ebro en La Rioja, y ante ello, la Consejería de Sostenibilidad y Transición Ecológica, dice en un informe de evaluación simple y carente de rigor técnico, que si a todo, sin haber evaluado la afección a una centenar de especies protegidas por la legislación europea y nacional.

La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha realizado recientemente un proyecto, de 598 páginas, que incluye un borrador de pliego de prescripciones técnicas particulares para la ejecución de obras, bajo el eufemismo de mejoras ambientales, en distintos tramos de ríos de la cuenca del Ebro en La Rioja (Iregua, Najerilla, Tirón, Leza y sus afluentes), sobre hábitats protegidos de especies listadas y catalogadas en la Red Natura 2000.

Ese proyecto fue remitido el pasado 22 de septiembre del año 2021 por la CHE al Servicio de Conservación de la Naturaleza y Planificación de la Dirección General de Biodiversidad del Gobierno de la Rioja para conocer la evaluación de las repercusiones ambientales. Para sorpresa de cualquier persona sensible en materia ambiental y conocedora del deplorable estado de conservación de nuestros ríos, el órgano ambiental competente regional se despachó favorablemente, con un informe de apenas 4 folios, a todas las actuaciones propuestas de la CHE, señalando escasas limitaciones físicas y temporales a las obras por la presencia de apenas dos especies protegidas (visón europeo y desmán ibérico), y afirmando, sin demostrar ni hacer una evaluación competente, que no se iban a producir afecciones significativas sobre hábitats y taxones de interés comunitario y que todas las actuaciones resultaban compatibles con los objetivos de conservación establecidos en los Planes de gestión y ordenación de los recursos naturales de espacios de la Red Natura 2000.

Nos llama la atención la simpleza argumental de nuestra administración regional a la hora de evaluar las actividades de impacto ambiental que propone la CHE sobre nuestros espacios y especies protegidos, por las siguientes cuatro razones:

En primer lugar, por su falta de diligencia con la sociedad civil, ya que no ha informado de ello en distintos órganos de participación, y ha tenido la oportunidad para ello, como en los Consejos Asesores de Medio Ambiente (al menos dos celebrados).

En segundo lugar, por el escaso rigor técnico y holístico en un informe administrativo de evaluación de los impactos al uso con una visión de conjunto propia del siglo XXI, porque esas obras afectan no solo a desmanes ibérico y visones europeos, sino también a muchas otras especies protegidas a nivel regional, nacional y europeo, y de forma significativa, sobre el castor europeo (Castor fiber) y a la nutria (Lutra lutra), por citar a otros mamíferos semiacuáticos igualmente protegidos. En tercer lugar, el Gobierno de la Rioja es conocedor del estado de conservación desfavorable e inadecuado de las dos únicas especies sobre las cuales ha mostrado reservas, y resulta que permite actuaciones humanas para degradar más aún ese estado de conservación, a pesar de que el mandato legal es el opuesto, el alcanzar un estado de conservación favorable.

En cuarto lugar, y más importante, porque aunque el informe de la CHE utilice eufemismos de “mejora ambiental” encubriendo limpiezas de márgenes que la Consejería de lo ambiental de La Rioja no ha atajado, nuestro Ejecutivo regional, en vez de abordar la necesidad de dejar más espacio a las depauperadas riberas (algo que la CHE no quiere abordar), tolera actuaciones que son contraproducentes, y que van a provocar numerosos efectos secundarios, todos ellos muy negativos, rompiendo puntualmente la dinámica hidromorfológica longitudinal, transversal y vertical, eliminando sedimentos y vegetación viva, las cuales está ejerciendo unas funciones de regulación en el funcionamiento, permitiendo la extracción de madera muerta, que también tiene una función fundamental en los procesos geomorfológicos y ecológicos, y perturbando el hábitat crítico de especies protegidas europeas. En definitiva, tanto la CHE como nuestro Gobierno, exhiben una visión del río muy primaria y obsoleta para el s. XXI, simplemente como conductor de agua de un punto a otro.

Los ciudadanos de La Rioja nos merecemos administraciones que velen de forma efectiva por el cumplimiento la legislación y por nuestro patrimonio natural en los ríos.

En Logroño, 16 de mayo de 2022.

Desde la administración regional de La Rioja se está impulsando una política ambiental que orbita en torno a la caza y la pesca como herramienta prioritaria de gestión del territorio. Además, se ha declarado públicamente que la caza es un recurso que no está explotado al máximo y se debe explotar aún más. Todos estos hechos en pro de la actividad cinegética resultan más que patentes en terrenos de titularidad pública, gestionadas directamente por la Administración, como es la Reserva Regional de Caza de Cameros-Demanda, donde el modelo de intensificación sobre ungulados salvajes (ciervos y jabalíes) impuesto es claramente un fracaso.

Las diversas manifestaciones y acciones del Gobierno de la Rioja de apuesta inequívoca por la intensificación y fomento de la caza como acicate para el desarrollo económico y la gestión ambiental nos produce pánico porque el ejercicio de una actividad recreativa, pero letal y con consecuencias brutales perniciosas para la naturaleza, debería constituir un aspecto supeditado a la conservación, cuestión que incumple repetidamente una consejería que se autodefine de Sostenibilidad y Transición Ecológica y que debería promover usos mucho más diversificados y sostenibles, especialmente, si no acredita el cumplimiento de los objetivos que perseguía. Si los objetivos no se cumplen (reducción numérica de algunas poblaciones de animales salvajes) es porque la gestión no ha funcionado y es el modelo el caduco.

La Red de Espacios Naturales fue creada con el fin de conservar el patrimonio natural de la Comunidad, así como promover la conservación de sus valores medioambientales, no sólo cinegéticos. El 33% de la superficie regional está protegida en la red ecológica europea de espacios protegidos (Red Natura 2000) y el 51% del territorio está sometido a alguna figura de protección adicional.

La política impulsada por el Gobierno de La Rioja está prestando especial atención a un porcentaje de la población que solamente representa al 4% de los habitantes de nuestra región, y se ignora que más del 96% de la población no ejerce la actividad cinegética. La utilización de la caza como herramienta básica de gestión ambiental en el 96% del territorio regional es una simplificación temeraria de un asunto complejo que afecta al funcionamiento de los ecosistemas, y por tanto al espacio vital de todos los ciudadanos. El incremento de la demanda de actividades de ocio y tiempo libre en la naturaleza, permite plantearse una vía clara de desarrollo de un sector de servicios ajeno a una actividad minoritaria como la caza (y muchas veces excluyente frente a otros usos, como los turísticos, etc.).

Desde Amigos de la Tierra La Rioja nos parece oportuno exigir que con los impuestos de la ciudadanía nuestro medio natural tenga otro tipo de gestión y una diversidad de usos que actualmente carece, ya que nos encontramos sujetos al yugo de una actividad cinegética en una superficie de 5.000 km2, que supone la muerte de casi 250.000 animales de forma anual, y que cuesta a todos los riojanos al menos 1.281.205 euros en los presupuestos regionales en el período 2019-2022. El Gobierno “progresista y del cambio” del PSOE no ha venido a corregir esta gravísima situación. A esa cantidad económica hay que añadir muchos más millones de euros provenientes de la externalización de los impactos de la caza (veneno, plumbismo, atropellos en carretera, coste ecológico de no tener una biodiversidad completa como la presencia de osos, lobos y linces, etc.). Una actividad como la caza debería estar basada en fundamentos sólidos, no económicos, sino también éticos, sociales y científicos, los cuales no justificarían nunca esa actividad.

En el contexto internacional se han ensayado numerosos programas de desarrollo al amparo de la protección de espacios naturales, que se han erigido en alternativas viables y compatibles con la conservación del entorno. Costa Rica o Bostwana, son países que han apostado por el ecoturismo como una de sus principales fuentes de ingresos renunciando a la caza. Y la cuestión es ¿qué ha hecho la administración regional al respecto? La falta de un modelo de estas características es uno de los principales males que acusan los espacios naturales de la Rioja, y sirve de ejemplo negativo sobre la falta de iniciativas y el fracaso nuestro gobierno en materias que no involucren el fomento de la caza.

En Logroño, 7 de mayo de 2022.